Historias de cuidado con Qida

Amalia, de 84 años, necesitaba una persona cuidadora que la acompañara durante unas horas al día. Gracias a Qida, encontró el apoyo de Karla, con quien comparte el tiempo y le ayuda a realizar sus actividades del día a día.

Adil, de 44 años, fue diagnosticado de ELA. A raíz del apoyo recibido por parte de una fundación, él y su esposa Wafaa conocieron a Qida. Desde entonces, el equipo y la persona cuidadora brindan la atención que necesitan en su domicilio.

Juan Antonio, de 56 años, fue diagnosticado de ELA. A través de una fundación, encontró el apoyo que necesitaba en Qida. A día de hoy, cuenta con los cuidados y el soporte de Mayra.

Cuando a la madre de Carmen le diagnosticaron Alzheimer, la preocupación por cómo afrontar su cuidado era inmensa. Sin embargo, gracias a nuestra colaboración con Pensium, consiguieron cubrir los cuidados que su madre merece sin perder la propiedad familiar.